Tengo la TBR hasta arriba y este año no estoy leyendo nada de nada. He comenzado un montón de historias, pero ninguna termina por atraparme, y eso me pone triste porque ya no sé si soy muy exigente o es que elijo mal mis lecturas. Además, me cuesta muchísimo concentrarme en ellas y especialmente dejarme llevar, las analizo todas: los personajes, la trama, el cómo están formadas las frases... Me rechinan las repeticiones y los adverbios terminados en -mente.

A veces me gustaría desconectar de la versión escritora sólo para disfrutar de un libro, aunque sea malo.